Una del oeste.

Hoy vamos al cine, dos películas calentitas, recientes del género de la ciencia ficción, género que considero de los pocos que pueden aportar algún guión sorpresivo y original en los tiempos que corren… La Primera es MOON, una película de las de antes, de la antigua escuela, sin mucho aparataje técnico pero de gran calidad visual y argumental..Dirigida por Duncan Jones, (si, hijo de David Bowie), se ha estrenado con muy poca repercusión oficial a pesar de obtener el premio como mejor película del festival de Sitges. La película estudia la reacción humana en un medio futurista. Rodada con un pobre presupuesto, dos actores (que son uno, Sam Rockwell) y unos decorados reducidos.. trata de la vida de un astronauta en la luna, dedicado a la explotación minera para la extracción de un isótopo muy energético, próximo a finalizar su contrato, tras años de soledad, solo acompañado por un robot, empieza a sufrir alucinaciones que conducen a un accidente.. accidente que provocará el descubrimiento de la mentira que ha sido su vida. Aunque guarda relación con algunas clásicas, como 2001, atmosfera cero, o naves misteriosas, la fuerza de Moon radica en estudiar la soledad del hombre en el espacio, sin semejantes, y su salud psicológica reforzada por la idea de volver.. al acabar su contrato. Con muy buenos diálogos y un desarrollo continuado hace de esta película un joyita impagable, para los amantes del buen cine y en especial del genero.. No os la perdáis.

Por otro lado la deseada, según prometían, PANDORUM, un nuevo thriller del espacio.. que sería la sustituta de ALIEN, de horizonte final y demás clásicas…Realizada como una gran producción, y con unos decorados de lujo, agobiantes y grandiosos, un director que apunta (de momento) Christian Alvart, la película se deja ver, pero huele a refrito.. Seguro que acabas olvidándola, hay criaturas muy malas, técnicos de lucha personal, y algún giro en el guión que te hace esperar algo más.. pero no es así. La idea de un apocalipsis de la tierra, y una nave perdida en cuyas manos está el destino de la humanidad, es vieja, los decorados recuerdan alien y el desarrollo del viaje se asemeja a la francesa, no muy conocida pero, sí muy buena, EDEN LOG, donde en cada estadio del trayecto aparecen nuevos personajes que revelan parte del misterio… Pero la metafísica, esta lejos de Solaris, y el desenlace es previsible a pesar de la sorpresa final.. La película no obstante es entretenida, para eso se ha hecho al gusto de los productores, con muchas concesiones al cine espectáculo y al gore…, extraños personajes que nos resultan familiares, un deja vu, que se extiende por toda la película… En una gigantesca nave exploratoria, dos astronautas despiertan de su hibernación, sin saber muy bien quienes son, ni que hacen, descubrirán que son supervivientes de una truncada misión para salvar la población de la tierra.. Pero la nave esta habitada por extrañas criaturas y terribles misterios que tratarán de resolver en su intento de reflotar la nave y hacerla operativa… con tétricos y opresivos escenarios, escenas de lucha muy elaboradas, y mucho artificio en las criaturas, no ofrece nada nuevo excepto algun giro de guión que te descoloca, pero que pronto asumes. Ideal para una tarde de domingo después de comer, sin muchas exigencias, pero rápidamente evocarás las clásicas de las que bebe : Alíen, Horizonte final, o Eden Log…Por cierto, pandorum, es un sindrome psicologico disfuncional que aparece en los astronautas en posición orbital..

Ya te digo, dos maneras de ver el espacio, una intimista abordando los problemas humanos creados por un entorno futurista, y otra un espectáculo futurista pero cuya temática podría desarrollarse en el oeste, en un barco pirata, o en los bosques de robin Hood una vez despojada de toda parafernalia técnica, pues prima el aspecto épico sobre lo demás.